Historia

Población de la provincia de Huesca que mira desde lo alto al río Alcanadre.
Al sureste de la Sierra de Alcubierre, en la comarca del Bajo Cinca, en Ontiñena se junta el secano y la ribera. Tierras áridas donde terminan Los Monegros por un lado y las aguas del antiguamente llamado Matapanizos, por su sequia estival, reverdecen las huertas por el otro.

Se han hallado restos arqueológicos en las márgenes de este río, en los lugares conocidos como El Puntal y El Juncal.

as casas se arremolinan en torno a lo que un día fue un castillo de origen prerrománico, reformado más tarde por los árabes y después por los templarios. Estos últimos construyeron también la iglesia parroquial de Santa María la Mayor y la Natividad. El edificio que se puede contemplar data del siglo XIII.

La villa de Ontiñena es mencionada por primera vez en un documento de 1089. Reconquistada a los musulmanes en 1102 por Pedro I se perdió de nuevo en la batalla de Fraga, 1134, siendo otra vez reconquistada por Ramón Berenguer IV. El conde de Barcelona, esposo de la reina Petronila de Aragón, después de un fuerte asedio, capturó a la caballería árabe dentro de los muros del castillo.

Esta fortaleza fue de gran importancia para la reconquista del valle del Cinca.
Se cuenta que residió durante medio año el rey Jaime I el Conquistador. Después que los templarios cayeron en desgracia, Ontiñena pasó a depender del monasterio de Sigena.